Cómo darle una pastilla a un perro

Para muchos dueños de perros, lograr que tomen medicamento puede ser un verdadero desafío. Un vistazo a una pastilla y sus mandíbulas se cierran con todas sus fuerzas. Sin embargo, hay formas de persuadir o engatusar a su perro para que trague su medicamento.

Cada perro es único, pero algunos conceptos básicos incluyen leer las instrucciones (obvias pero a menudo ignoradas) para saber cómo y cuándo administrar el medicamento, teniendo en cuenta los efectos secundarios.

Mientras que algunos perros aceptan las pastillas con la mano, a otros no les importa incluirlas en su comida habitual. Para aquellos que necesitan un disfraz más sabroso, te recomendamos esconder las pastillas en premios irresistibles como albóndigas o queso, para garantizar que tu perro apenas note la sorpresa no deseada.

Si se trata de medicamentos líquidos y el método de la jeringa resulta difícil, no dudes en pedirle a tu veterinario soluciones alternativas. Las tabletas masticables con sabor o las inyecciones podrían ser opciones. Recuerda, tu veterinario te guiará sobre el mejor enfoque para garantizar que tu amigo peludo reciba la atención que necesita con el mínimo esfuerzo.

Conseguir que tu perro se tome una pastilla o se quede quieto mientras le pones una jeringa puede ser una batalla muy difícil. La mayoría de los perros comen con gusto restos de basura o beben agua del baño, pero cuando se trata de tragar una pastilla, no pueden evitarlo.

Entonces, ¿Cuál es el secreto? No existe una solución única para todos los casos en lo que respecta a la medicación de tu perro, todos son únicos. A continuación te damos algunos pasos a seguir:

Lee las instrucciones

Al administrar medicamentos a tu perro, tu primera responsabilidad es asegurarte de comprender las instrucciones que te dió el veterinario. Algunos medicamentos deben tomarse con el estómago vacío, otros con la comida.

También puede haber advertencias sobre la combinación de determinados medicamentos o efectos secundarios a los que se debe prestar atención. Es fundamental leer atentamente la etiqueta con instrucciones y consultar con el veterinario si tienes alguna duda.

Esconde el medicamento en su comida

Si a tu perro le han dado una pastilla para tomar con la comida, este es el método más fácil de medicarlo. Si es posible, espera a que tu perro tenga hambre y esconde la pastilla en su comida. Los dueños de mascotas afortunados tendrán perros que devoren su cena sin notar la pequeña sorpresa. Sin embargo, algunos perros no son tan fáciles de engañar y esto puede resultar un poco difícil si el tuyo prefiere las croquetas.

Esconde la pastilla en un premio

En lugar de ofrecerle a tu perro una saludable zanahoria o una rodaja de manzana, opta por algo irresistible para ocultar la sorpresa no deseada. Esconde la pastilla por completo moldeándola en premios como albóndigas, trocitos de queso, o algo que sepas que le va a encantar. De esta manera, ni siquiera notará ni le importará el medicamento que contiene.

Si tu perro lo escupe, no te preocupes. Vuelve a intentarlo en media hora con un premio diferente y dale algunos premios que no sean pastillas primero.

¿Puedo darle medicamentos a mi perro con la mano?

Si es necesario, puedes utilizar las manos, pero debes tomar precauciones, especialmente si tu perro tiene dolor en la zona del cuello. Si tu veterinario lo aprueba, puedes cubrir la pastilla con alimento húmedo para perro, para que sea más fácil de tragar.

Elije un lugar cómodo, protege la pastilla de la vista de tu perro y sostenla entre rus dedos. Sujeta suavemente el hocico de tu perro, inclina su cabeza hacia arriba y deja caer la pastilla en la parte posterior de su lengua. Cierra su boca y vuelve a colocar su cabeza en la posición normal. Masajea su garganta y sopla suavemente sobre su nariz para incitarlo a tragar.

Si el medicamento se administra en forma líquida, no inclines el mentón de tu perro hacia arriba. Coloca la jeringa llena de líquido en el costado de la boca, justo más allá de los dientes inferiores. Aplica lentamente pequeñas cantidades en la boca, haciendo una pausa entre cada aplicación para permitir que tu perro trague el medicamento sin atragantarse ni atragantarse.

Si tienes dificultades para medicar a tu mascota, consulta a tu veterinario sobre otras opciones, ya que pueden ser alternativas más sencillas que darle una pastilla. Engañar a tu perro para que tenga buena salud puede ser un desafío, pero vale la pena.